lunes, 24 de agosto de 2015

Citas truncadas

Me encanta que pongáis un teléfono al que llamar para anular o cambiar una cita. Viene fenomenal cuando te mueves por toda Andalucía, haciendo malabares para poder compaginar 800 citas, un trabajo a más de 300 km de casa, un mal horario y una fatal combinación de autobuses para volver.

Rectifico. Vendría genial si me cogiérais el telefono... Pero no, puedes pasarte una semana, un mes, llamando cada media hora, y cogerán algún día (por equivocación, te lo aseguro) y entonces será cuando te suelten que es que tenías que haber llamado con no se cuántos días de antelación, que ya no pueden hacer nada, que tendrás que solicitar la cita de nuevo y empezar el procedimiento.

Y da igual que le expliques que llevas llamando desde que recibiste la cita y que son ellos los que no han cogido, y da igual que le lloriquees, que le expliques tu situación porque no les importa...

A veces quiero creer en vosotros, en que habéis estado ocupados, pero he decidido que no... Porque la realidad suele ser otra. Que os den, que os den a todos, porque os veo allí con el teléfono sonando y haciendo como los que no escucháis o, simple y llanamente, pasando del tema mientras charláis de algo totalmente intrascendental ¿Cuándo fue que perdísteis la ilusión por vuestro trabajo? o más bien ¿Por qué perdísteis las ganas de ayudar a los demas?

3 comentarios:

  1. Hace unos años me pasó que llamé (tras mil llamadas conseguí que me lo cogieron) para cancelar cita y que me dieran otra con hematología porque operaban a mi madre. Me dijeron q anulaban la cita pero tenía que ir al mostrador a pedir la nueva. Piensas que tienes que justificar o lo que sea con algún papel.
    Total el hospital lo tengo a unos 30 kms así que agotada al salir de trabajar decidí ir (sin comer) porque desde allí está a unos 10.
    Pues me dio la cita sin más, le daba igual q hubiera cancelado o lo que fuera, era putear para que no canceles-
    La cuestión es q si a mí en mi situación me costó ir, imagina que la titular de la tarjeta es una anciana con problemas de movilidad y llevas a la abuela para eso

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  2. Buena explicación de por qué siempre me doy el paseo al hospital en vez de llamar por teléfono, de por qué ni siquiera llevo el teléfono del hospital conmigo.
    Y también buena explicación de por qué me deprimo cada vez que tengo que "razonar" algo con el personal de las ventanillas de citas, aunque sea en persona.
    Besote niña, Cleo

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  3. Buena explicación de por qué siempre me doy el paseo al hospital en vez de llamar por teléfono, de por qué ni siquiera llevo el teléfono del hospital conmigo.
    Y también buena explicación de por qué me deprimo cada vez que tengo que "razonar" algo con el personal de las ventanillas de citas, aunque sea en persona.
    Besote niña, Cleo

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